
Mundo 2 - Cuphead

Sugarland Shimmy

Este jefe comienza como una sucesión de mini jefes que van apareciendo de forma aleatoria en cada intento que hagamos, por lo que no siempre aparecerán los mismos enemigos ni en el mismo orden. Lo bueno es que todos ellos atacan de una misma manera, por lo que puede resultar fácil aprenderse los patrones para poder esquivarlos.
Una vez que hayamos derrotado a tres de estos mini jefes, el castillo comenzará a moverse y a perseguirnos, por lo que tendremos que esquivar sus ataques mientras nos movemos y disparamos a la vez. Esta fase tiene dos ataques muy específicos: lanzarnos un caramelo rodante que podemos esquivar saltando o con un parry, y una cabeza que nos va persiguiendo constantemente y que se va deteniendo de vez en cuando, lo cual podemos aprovechar para prevenir su siguiente ataque.
Aviary Action!

Volvemos a encontrarnos ante otro jefe al estilo de Galaga. La primera fase es muy sencilla si nos mantenemos pegados a la parte izquierda del escenario, ya que esto facilita el esquive de los huevos, pájaros y balas que nos lanzará.
Una vez finalizada esta parte de la batalla, el jefe comenzará a disparar plumas en todas direcciones mientras más pájaros siguen cruzando la pantalla de un lado a otro. Esta fase es muy fácil, ya que únicamente tenemos que disparar y esquivar las plumas con cuidado en la misma posición, ya que siempre siguen el mismo patrón.
La siguiente fase es un poco más complicada, ya que aparecerá el hijo del jefe principal, quien se rodea de varios huevos que van girando a su alrededor mientras se hacen grandes y chicos. Mientras tanto, el infante aprovechará para dispararnos con su pistolas, nos lanzará unos proyectiles a los que podemos hacer parry. Finalmente, la parte final de la batalla se supera fácil disparando bombas y esquivando los proyectiles que nos arrojarán desde abajo.
Carnival Kerfuffle

Este combate comienza con el jefe montado en un carrito. Simplemente dispara y esquiva saltando sus embestidas cuando veas que las va a hacer. Eso sí, procura golpear también las dianas con forma de pato que hay en la parte superior de la pantalla, ya que hacen daño si las tocas sin atacarlas.
La segunda fase es muy fácil si lo haces con el arma Spread, ya que tendremos que mantenernos en el centro mientras globos con forma de perro vienen a atacarnos y un vagón de montaña rusa pasa debajo nuestra, teniendo que saltar a las personas que hay montadas sobre él para no recibir daño. Como los globos se destruyen con nuestros disparos, con Spread los destruiremos fácilmente al mismo tiempo que golpeamos al jefe.
En esta nueva parte del combate continuarán pasando los vagones de la montaña rusa, aunque ahora nuestro enemigo nos lanzará unos proyectiles con forma de herradura. Hay de dos tipos: unos amarillos que atraviesan rápidamente la pantalla para situarse en la parte superior antes de caer sobre nosotros, obligándonos a colocarnos en la única zona que quede libre de herraduras para esquivar el ataque, y otros proyectiles verdes que nos lanzará a de dos en dos, y que irán zigzageando hacia delante.
Al llegar a la fase final, el propio jefe se convertirá en un carrusel gigante. Aquí tendremos que atacar a su cara, la cual está justo en el centro de la pantalla, mientras esquivamos los vagones de la montaña rusa, los cuales ahora pasan a toda velocidad. De vez en cuando también lanzará unos pingüinos que lanzan balas, aunque a estos últimos los podemos destruir para que no nos hagan daño.
Fiery Frolic

Esta batalla pondrá a prueba nuestras habilidades, ya que todo el combate se desarrolla sobre unas pequeñas nubes que no paran de moverse. Como era de esperar, el jefe aprovechará para lanzarnos ondas psíquicas, bolas de fuego y para atacarnos desde abajo con su cola, por lo que tendremos que estar buscando constantemente la mejor plataforma para esquivar estos ataques.
La siguiente parte del combate se simplifica muchísimo con el arma Chaser, ya que no tendremos que preocuparnos de apuntar y solo nos tocará centrarnos en esquivar a las llamas que nos lanzarán desde la parte inferior del escenario.
La fase final es la más complicada de todas, ya que aquí el dragón tendrá tres cabezas en vez de una y nos lanzará unos proyectiles que si rompemos se dividirán en muchos más, por lo que hay que tener mucho cuidado a la hora de atacar. Su otro ataque del que tenemos que cuidarnos es uno con el que se convierte en un soplete y comienza a disparar fuego en línea recta. Para esquivarlo simplemente tenemos que subirnos a las nubes más altas.
Pyramid Peril

Este es otro jefe al estilo de Galaga. Durante la primera fase abrirá un cofre del que pueden salir distintos tipos de proyectiles, los cuales tenemos que esquivar moviéndonos. Una vez hayamos realizado el daño suficiente, el scroll de la pantalla comenzará a avanzar y aparecerán unas columnas divididas en varias partes. Para abrirnos camino tendremos que apuntar a las zonas donde veamos una cara, aunque mucho cuidado, ya que si tocamos cualquier parte del escenario recibiremos daño, incluyendo todos los bordes.
Tras esto dará comienzo la siguiente parte de la batalla, donde nuestro enemigo adoptará la forma de un sarcófago. Al abrirlo comenzarán a salir momias fantasmales que avanzaran en línea recta y una cara naranja nos atacará lanzándonos rayos con sus ojos. El truco es atacar la cara naranja.
En esta nueva fase, el jefe creará una marioneta con la forma de nuestro protagonista a la que tendremos que destruir. Esta nos ataca únicamente con proyectiles, aunque al mismo tiempo habrá un sombrero dando vueltas por el escenario y disparando balas a toda velocidad, por lo que tendremos que centrarnos en evitar todos estos ataques al mismo tiempo.
La última fase del combate, el jefe saca tres pirámides que van girando a nuestro alrededor. Cuando una de ellas que abra los ojos significará que lanzará un gran rayo en forma de cruz desde su posición, momento en el que el jefe también atacará para lanzarnos una onda psíquica, obligándonos a colocarnos muy bien y a movernos siguiendo el patrón de la pirámide que esté atacando para esquivar con éxito.